La genetista del Hospital Universitario de Jaén Ana García Ruano ha participado en la I Jornada de Innovación en Medicina de Laboratorio, (iMedLab), organizada por la Asociación Española de Biopatología Médica – Medicina de Laboratorio (AEBM-ML), cuyo objetivo ha sido el de organizar un itinerario científico basado en un problema de salud concreto, con el fin de presentar lo más relevante, novedoso y de interés general que se encuentre relacionado con la patología.
En esta primera jornada, en la que han participado profesionales de distintas especialidades, se ha abordado en concreto la diabetes, por lo que García Ruano ha presentado el desarrollo del cribado oportunista de diabetes y prediabetes que viene realizando el Laboratorio del Hospital de Jaén desde 2019 y que se ha basado en la determinación de hemoglobina glicosilada de los pacientes objeto de análisis.
En un primer estudio, el Laboratorio hospitalario analizó un total de 3.725 pacientes. Los resultados demostraron la fiabilidad de una prueba que permite conocer la tendencia del paciente a desarrollar diabetes según los niveles que presenta de hemoglobina glicosilada.
Precisamente, el cribado oportunista está considerado por el Plan Integral de Diabetes de la Consejería de Salud y Consumo como una estrategia principal de diagnóstico precoz de la enfermedad. De hecho, el estudio del Laboratorio del Hospital de Jaén añade dicha prueba a todos los pacientes mayores de 45 años a los que se les solicita una analítica por Atención Primaria, de tal manera que se pretende controlar cuanto antes los niveles de glucosa susceptibles de desencadenar la patología.
La prueba mide el nivel promedio de glucosa o azúcar en la sangre durante los últimos tres meses y se emplea principalmente para diagnosticar diabetes de tipo 1 y tipo 2 y prediabetes. Su realización es fundamental para conocer posibles riesgos en el paciente. Si el mismo tiene prediabetes, para controlar que no se produzca una diabetes o una enfermedad cardiovascular.
Del proyecto llevado a cabo en el centro se desprende la importancia de la medicina preventiva, ya que la forma óptima de evitar que aumenten los niveles de hemoglobina glicosilada en la sangre y que, por lo tanto, corramos el riesgo de padecer diabetes, es mantener una alimentación y otros hábitos de vida saludable, como incorporar la práctica del ejercicio físico, dormir al menos 7 horas, así como evitar productos ricos en azúcar y la ingesta de alcohol.