El Hospital Universitario de Jaén se ha adherido a la campaña puesta en marcha por la Organización Mundial de la Salud (OMS) con motivo de la celebración del día de esta práctica de higiene de manos, con el mensaje “Únete a la seguridad de la atención sanitaria: límpiate las manos”.
El tema del Día Mundial de la Higiene de las Manos 2022, se centra en el reconocimiento de que las personas de todos los niveles pueden trabajar juntas a través de unas manos limpias, para alcanzar el objetivo común de la seguridad y la calidad en la prestación de la asistencia sanitaria. Una sólida cultura de la calidad y la seguridad animará y apoyará a las personas a limpiarse las manos en los momentos adecuados y con los productos adecuados.
El hospital público de la capital jiennense ha publicado un vídeo explicativo con los pasos correctos para una correcta higiene de manos, accesible en Youtube, https://youtu.be/PpJRxbjmUHk, además de colocar cartelería para fomentar esta práctica,y explicar a los usuarios ingresados y acompañantes cómo deben lavarse las manos en mesas informativas.
Esta iniciativa consiste en incidir en la importancia que tiene para los profesionales sanitarios, y personas que visitan el centro, el lavarse las manos en los momentos adecuados, porque permite una atención a los pacientes más segura hasta el punto de salvar vidas. Para la higiene de manos, además de jabón, pueden usarse desinfectantes, compuestos sobre todo de alcohol, y son accesibles a la ciudadanía.
“Es importante tener en cuenta la importancia del lavado de manos y, desde el Hospital de Jaén, vamos a informar sobre un mensaje fundamental, y es el uso adecuado de guantes. Puede darnos una falsa sensación personal de seguridad; su uso incorrecto puede favorecer la transmisión de gérmenes multiresistentes. Junto a ello, debemos fomentar la práctica del reciclaje de este tipo de materiales, para evitar contaminar el medio ambiente”, ha indicado el director de la Unidad de Medicina Preventiva del centro sanitario, Rafael Martínez .
Correcto lavado de manos
Lavarse las manos con agua y jabón es la medida preventiva más importante para evitar la transmisión de infecciones. Lo demuestra, por ejemplo, el hecho de que alrededor del 7% de los pacientes ingresados en un hospital puede llegar a desarrollar alguna infección adquirida durante la asistencia sanitaria. Infecciones que se pueden prevenir en un muy alto porcentaje mediante una buena higiene de manos, en el momento oportuno y de forma apropiada. Lavarse las manos, en definitiva, es la herramienta fundamental para controlar y prevenir estas infecciones.
Las directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS) contribuyen a promover y mejorar la higiene de las manos en los centros sanitarios de todo el mundo y en la población general. En los estudios realizados se demuestra que, antes de la pandemia, la higiene de manos se realizaba en un 20-30% menos de lo que se debería realizar según la OMS. Por ello, y pese a que durante la pandemia del COVID-19 su práctica se ha incrementado mucho entre toda la población, desde la Consejería de Salud y Familia se recuerda que no se puede bajar la guardia en la medida universal de prevención de las infecciones que más vidas está salvando.
Población vulnerable
Con las manos nos comunicamos con nuestros seres queridos, ayudamos a movilizar enfermos y personas mayores, nos desplazamos en ascensores o escaleras. Por ello, no hay que utilizar guantes de manera indiscriminada, solo cuando esté indicado. Es la forma de diseminar los gérmenes. Así, todos nos protegemos mejor y protegemos a los demás.
Los guantes, que no sustituyen el lavado de manos sino que lo complementan, constituyen una barrera física que protege tanto a los trabajadores de los servicios sanitarios y sociosanitarios como a los pacientes y usuarios de residencias, al reducir la probabilidad de que los microorganismos existentes en las manos se transmitan, si previamente no se ha realizado una correcta higiene de manos.
Además, Salud y Familias recuerda que lavarse las manos es primordial en el día a día de la población en general y, particularmente, en el personal sanitario, quienes deben tener en cuenta cinco momentos para esta higiene: antes del contacto con el paciente, antes de un procedimiento limpio o aséptico, después de haber tenido riesgo de exposición a fluidos corporales, tras el contacto con el paciente y después de tocar el entorno del mismo.