El servicio de Medicina Preventiva del Hospital Universitario de Jaén ha organizado un curso sobre bacterias multirresistentes, donde 25 profesionales se han formado en estrategias y medidas para su vigilancia, seguimiento y control.
El objetivo de esta formación es sensibilizar a los profesionales del hospital, sobre el impacto asistencial que suponen las BMR, la importancia del adecuado seguimiento y control de éstas, lo esencial de establecer las medidas adecuadas destinadas a prevenir la propagación de estos microorganismos entre pacientes, personal y visitantes, a través del conocimiento de las medidas y medios disponibles para conseguir este fin.
Las infecciones relacionadas con la asistencia sanitaria (IRAS) causadas por bacterias multirresistentes (BMR), también denominadas “superbacterias”, constituyen un grave problema de Salud Pública con un importante impacto clínico y económico.
Durante casi un siglo, los medicamentos para combatir las bacterias, conocidos como antibióticos, han ayudado a controlar y tratar las infecciones provocadas por bacterias.
Pero en las últimas décadas muchos antibióticos han perdido su efectividad, ya que la forma en que hemos utilizado los antibióticos está ayudando a crear «superbacterias», que son resistentes a muchos antibióticos habituales.
Según el Plan Nacional de Resistencias a los antibióticos (PRAN), las bacterias multirresistentes causan alrededor de 33.000 muertes al año en Europa y generan un gasto sanitario adicional de unos 1.500 millones de euros.
“Por lo tanto, el desarrollo de bacterias resistentes a este tipo de medicamentos, constituye una de las amenazas más serias para la Salud Pública, de ahí la importancia en que los profesionales del Hospital Universitario Jaén cuenten con formación amplia y específica”, ha señalado el director de la Unidad de Medicina Preventiva, Rafael Martínez. “La prevención y el control de infecciones, a través de la aplicación de estrategias multimodales, nos ayuda a reducir las infecciones relacionadas con la asistencia sanitaria, incrementado de esta forma la Seguridad del Paciente”, ha enfatizado.
Un componente esencial en cualquier programa de control de las BMR, es la vigilancia epidemiológica, que se puede definir como el proceso de recogida, análisis e interpretación de datos y la distribución de la información resultante a los servicios asistenciales y profesionales implicados.
“Gracias al conocimiento de esta información, podemos adoptar posteriormente las medidas de prevención y control más adecuadas a cada situación”, ha indicado Martínez. “Es importante saber, que unas de estas medidas de prevención y control básicas, están basadas en el cumplimiento de las precauciones estándar y en el establecer las precauciones basadas en los mecanismos de transmisión, cuando esté indicado. Estas precauciones y los momentos en las que establecerlas, deben ser dominadas por todos los profesionales sanitarios, además de conocer el sistema HAM de la Consejería de Salud (Health Alert Monitoring) y las ayudas que proporciona este sistema en la mejora del seguimiento y control de BMR”, ha incidido el jefe de la Unidad.