El Hospital Universitario de Jaén participa en la Semana de las Enfermedades Hepáticas, que organiza la Asociación Española para el Estudio del Hígado (AEEH) y que ha llevado a diferentes centros del Sistema Sanitario Público de Andalucía a desarrollar tanto sesiones, talleres y encuentros entre especialistas, como actividades divulgativas dirigidas a centros educativos. El objetivo es hacer balance de la evolución de estas patologías en Andalucía, dar a conocerlas en la sociedad y concienciar sobre la importancia de su detección y tratamiento precoz.
En concreto, los especialistas de la Unidad de Aparato Digestivo del Hospital Universitario de Jaén Laura Castillo y Shukri Jamal han abordado en una mesa redonda con otros profesionales el cribado y diagnóstico de cáncer de hígado y las perspectivas futuras y la actualización en el tratamiento de la patología respectivamente.
Los especialistas advierten de que uno de cada cuatro jiennenses sufre una patología de tipo hepático. En este sentido, destacan que la incidencia del cáncer de hígado está evolucionando en España y ya representa el 2,3% de todos los tumores y el sexto en prevalencia en nuestro país. Se trata del segundo tipo de cáncer que más años de vida resta a la población y que, además, puede experimentar un gran crecimiento a nivel nacional, asociado a la obesidad y a un consumo de alcohol que comienza cada vez en edades más tempranas. El alcohol está, en concreto, detrás de más del 60% de los casos de cáncer de hígado, siendo el hepatocarcinoma el tumor primario del hígado más frecuente, entre el 80 y el 90 por ciento, seguido del colangiocarcinoma.
Uno de los principales objetivos de las jornadas es el de concienciar a los jóvenes sobre el peligro del consumo de alcohol para el hígado. Pretenden también hacer hincapié en la importancia de mejorar las políticas de cribado y detección precoz de las patologías hepáticas. Cada año se diagnostican en España 6.600 nuevos casos de cáncer de hígado, de los que aproximadamente la mitad corresponden a pacientes con la enfermedad en un estadio ya muy avanzado. El diagnóstico temprano puede multiplicar hasta por cinco las posibilidades de supervivencia.
Hepatitis C
La hepatitis C es la segunda causa relacionada con el cáncer de hígado. En concreto, se estima que entre el 60 y el 90 por ciento de los casos están asociados a cirrosis, cuya causa de origen es el consumo de alcohol o infección crónica por virus de la hepatitis B o principalmente en nuestro entorno, hepatitis C. Los avances para la eliminación de la hepatitis C en España en general y en Andalucía en particular han sido muy importantes gracias a la universalización del tratamiento que cura la hepatitis C. Hasta el momento se han tratado a más de 158.000 personas en España, que es por ello el país con mejores indicadores de tratamiento.
Hígado graso
Una tercera causa que viene cobrando importancia en el cáncer de hígado es la acumulación de grasa en el órgano (hígado graso), cuyos factores de riesgo son el sobrepeso, la diabetes tipo 2, el colesterol y la presión arterial alta (HTA). La Enfermedad Hepática Metabólica (HEPmet) o esteatosis hepática, más conocida como “hígado graso”, afecta a más de dos millones de personas en Andalucía. Aunque la hepatitis alcohólica y la hepatitis C siguen siendo las causas predominantes de hepatocarcinoma, el hígado graso va a ser un factor de riesgo cada vez más importante en el cáncer de hígado, dado que se vincula principalmente a la obesidad. No todos los casos de NASH tienen que ver con el sobrepeso, pero la mayoría sí están relacionados y ésta es la razón de que el hígado graso ya sea la primera causa de enfermedad hepática crónica.
Los especialistas advierten de que la prevalencia creciente del hígado graso, asociada a factores de riesgo cada vez más comunes en la sociedad actual, puede llegar a disparar los nuevos casos de cáncer de hígado. Se estima, en concreto, que el hígado graso estará detrás de la mayoría de cánceres hepáticos en apenas una década y alarma especialmente su impacto en la población más joven, pues ocho de cada diez adolescentes con obesidad presentan hígado graso. De hecho, la presencia de cáncer de hígado en pacientes con hígado graso en España se ha triplicado en la última década.